Que el olvido no termine de matar a las víctimas de crímenes de Estado.
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El pasado jueves 24 de febrero del presente año tuvo lugar un encuentro en el planetario distrital para conmemorar la memoria de las víctimas de crímenes de Estado, y la muerte del joven anarquista de 15 años, Nicolás Neira, quien fue golpeado brutalmente por miembros del Escuadrón Móvil Anti Disturbios (ESMAD) el primero de mayo del 2005 durante una marcha por el día del trabajo. Cinco días después fue declarado muerto por los médicos de la clínica Jorge Piñeros Corpas de Saludcoop.
El acto se inició a las 2:30 de la tarde y progresó por la séptima hasta el parque Santander. Hubo dos paradas: la primera en la carrera 7 con calle 19, donde se recitaron algunos poemas de los manifestantes y se llamó a la calma pues era una marcha que buscaba demostrar que los participantes iban de manera pacífica a protestar contra actos de violencia desde las acciones de paz.
Erick Arellana, profesor de la Universidad Central, afirmó que “este espacio es para recordar que sus historias de vida han sido truncadas por la violencia que se ejerce contra una parte de la población que no está de acuerdo con las dinámicas represivas”.
La segunda parada fue en la séptima con 17 frente a la placa conmemorativa del asesinato de Nicolás, Yuri Neira, su padre, le rindió un homenaje pegándole un clavel a la placa y dándole uno más a uno de los policías, y así mismo les pidió a los asistentes que cada uno le entregara un clavel a los miembros del ESMAD presentes en el acto.
Al acto asistieron familiares de victimas de la violencia por parte del Estado, movimiento estudiantil, organizaciones de víctimas e hijos de víctimas de crímenes de Estado.
Finalmente el acto fue aplacado por una torrencial lluvia que obligó a los asistentes a dispersarse.
Denuncias:
Yury Neira denunció dos atentados que le ha hecho la Policía Nacional, un allanamiento donde se le perdieron los discos duros de los computadores y un portátil de un amigo donde tenía cientos de fotos, su detención 24 veces aparentemente arbitraria además de la impunidad y olvido al que han sido sometidas las víctimas de Estado.
Durante la culminación del acto en el parque Santander una estudiante de la Universidad de Antioquia tomó la palabra y denunció que en su universidad desde el 15 de este mes hay disponibles del ESMAD que son los que controlan la entrada y salida de las personas de la universidad pública, son los que hacen las requisas y al menor ruido entran al recinto académico a golpear y lanzar gases lacrimógenos, donde personas ajenas al movimiento estudiantil salen afectadas. También denunció que les han dado un chip para registrar la entrada y salida de los estudiantes y que posiblemente el gobierno quiera hacer esto en todas las universidades públicas del país, por lo que hizo un llamado a la movilización por la libertad y el respeto a la privacidad.
Les dejo el programa de Contra Vía que cubrió el evento:
